Y cuando resultaba que la monotonía se había apoderado de mi vida, ojo, una monotonía buena, alguien hace que me olvide durante unos momentos de mi lucha diaría con el mundo, me saca un sabado por la mañana de casa y me sorprende con un viaje que resultó ser uno de los mejores que recuerdo, quizá por que no estaba preparado ni tenía ninguna espectativa al respecto.
Y allí entre montes y calas preciosas me reí, me relajé y durante dos días mi cabeza no estalló, no me importó compartir mi espacio vital con él, simplemente dejé que las horas pasaran y casí no me enteré de que lo hacían.
Y despues de una semana de locura y de gente que me pone la cabeza como un bombo, hay que decir que siempre son los mismos..., pues llega el fin de semana y una mala noticia enturbia mi paz, una muy mala noticia. Pero la sonrisa regresó en forma de aire fresco nocturno y una cerveza fría, asi que gracias por estar ahí siempre y por hacerme ver que quizá estaba equivocada en mis pronosticos diarios.
Y sin olvidarme ni un segundo de esa persona que se marchó el viernes para no volver, y aunque han pasado mil años siempre recordaré la paciencia que tenías con todos nosotros cuando de pequeños te volvíamos loco y los paseos que dabas y que no dejaste hasta el ultimo segundo, un beso estes donde estes.
MIMI-------------------------------------------
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